En los últimos años, el desfile del ‘Regimiento Inmortal’ ha cobrado notoriedad en diversas ciudades del mundo, y Madrid no ha sido la excepción. Este evento, que conmemora a los caídos en la Segunda Guerra Mundial, se ha convertido en un punto de encuentro para los rusos que residen en España, pero también ha suscitado críticas y tensiones debido a su vinculación con la propaganda del régimen de Vladimir Putin. El 11 de mayo de 2025, cientos de personas se congregaron en el paseo del Prado para participar en esta marcha, que, según los organizadores, reunió a cerca de 3,000 asistentes. Sin embargo, fuentes independientes han cuestionado estas cifras, sugiriendo que la participación real fue mucho menor.
La marcha se desarrolló en un ambiente de paz, aunque no sin incidentes. Algunos opositores a la guerra intentaron expresar su desacuerdo y fueron reprimidos por las fuerzas del orden. Este tipo de confrontaciones pone de manifiesto la polarización que ha generado la guerra en Ucrania, dividiendo a la comunidad rusa en España entre quienes apoyan al Kremlin y quienes se oponen a su política.
### La Propaganda y la Manipulación de la Historia
El ‘Regimiento Inmortal’ no solo es un acto de recuerdo; también es un vehículo para la propaganda del Kremlin. La marcha en Madrid incluyó retratos de figuras históricas controvertidas como Joseph Stalin, así como del actual presidente ruso, Vladimir Putin. La presencia de banderas soviéticas y otros símbolos asociados con el régimen ruso ha sido criticada por muchos, quienes ven en ello una glorificación de un pasado que debería ser recordado con cautela.
Alekséi Nesterenko, presidente de Los Rusos Libres, una organización que agrupa a ciudadanos rusos en España que se oponen al régimen de Putin, ha denunciado que la propaganda rusa busca inflar las cifras de participación en estos eventos para mostrar una imagen de fuerza y unidad. Según Nesterenko, este tipo de manipulación no es casual, sino parte de una estrategia más amplia para mantener el control sobre la narrativa histórica y política en la diáspora rusa.
La organizadora del evento, Victoria Samoilova, ha defendido la marcha como una celebración legítima de la memoria histórica, aunque ha evitado hablar con los medios que considera alineados con la OTAN. Esta actitud refleja una creciente desconfianza hacia los medios de comunicación occidentales, que son vistos por algunos como adversarios de la narrativa rusa.
### La Reacción de la Comunidad y las Autoridades
La comunidad rusa en España se encuentra en una encrucijada. La guerra en Ucrania ha dividido a muchos, y las tensiones se han intensificado en el contexto de eventos como el ‘Regimiento Inmortal’. Algunos miembros de la comunidad, como Sofia Ladaniuk, han denunciado la desinformación que circula en los canales de Telegram asociados con Samoilova, donde se difunden noticias falsas y se atacan a líderes occidentales. Esta situación ha llevado a un clima de desconfianza y miedo entre aquellos que se oponen a la guerra.
Las autoridades españolas han tenido que lidiar con la complejidad de estos eventos, tratando de equilibrar el derecho a la libre expresión con la necesidad de mantener el orden público. Durante la marcha, se registraron arrestos de opositores que intentaron manifestarse pacíficamente, lo que ha suscitado críticas sobre la actuación de la policía y la gestión de la protesta.
A nivel internacional, muchos países han comenzado a restringir o prohibir actos similares debido a su naturaleza propagandística. En lugares como los países bálticos y Ucrania, las celebraciones del Día de la Victoria han sido completamente prohibidas, mientras que en Alemania se han impuesto restricciones severas sobre la exhibición de símbolos rusos. Estas acciones reflejan un creciente consenso sobre la necesidad de limitar la glorificación de un régimen que ha sido acusado de crímenes de guerra y agresiones internacionales.
La situación en España, donde el ‘Regimiento Inmortal’ ha encontrado un espacio para llevar a cabo sus actividades, plantea preguntas sobre la laxitud legal en torno a la propaganda pro-Putin. Los opositores al régimen han instado a las autoridades a tomar medidas más firmes para evitar que estas manifestaciones se conviertan en plataformas para la desinformación y la exaltación de un régimen que muchos consideran una amenaza para la paz y la estabilidad en Europa.
En resumen, el desfile del ‘Regimiento Inmortal’ en Madrid es un reflejo de las tensiones actuales en la comunidad rusa y de la compleja relación entre la historia, la memoria y la política contemporánea. A medida que la guerra en Ucrania continúa, es probable que estos eventos sigan siendo un punto de controversia y debate en España y más allá.