La Capilla Sixtina, un lugar emblemático de la historia del arte y la religión, fue testigo de un acontecimiento sin precedentes el pasado 23 de octubre de 2025. Por primera vez, el Papa León XIV y el rey Carlos III de Inglaterra, líder de la Iglesia anglicana, se unieron en oración en este icónico espacio, marcando un hito en la relación entre ambas iglesias. Este evento no solo simboliza la reconciliación entre la Iglesia católica y la anglicana, sino que también resalta la importancia de la defensa del medio ambiente, un tema central en la oración conjunta.
### Un Encuentro de Reconciliación
La ceremonia comenzó con una reunión privada entre León XIV y los monarcas británicos, donde se intercambiaron regalos significativos. Carlos III obsequió al Papa una fotografía de plata y un ícono de San Eduardo, mientras que el Papa le entregó una versión a escala del mosaico de ‘Cristo Pantocrátor’ de la Catedral Normanda de Cefalú, un gesto que simboliza la unión y el respeto mutuo entre ambas figuras religiosas. Este encuentro se produce en un contexto donde la historia de separación entre las dos iglesias, que se remonta a la ruptura de Enrique VIII en 1534, ha dejado una huella profunda en la historia religiosa de Europa.
La oración ecuménica, que se llevó a cabo en inglés, se centró en la creación y la necesidad urgente de cuidar el medio ambiente. Este enfoque refleja la creciente preocupación por los problemas ambientales que enfrenta el mundo actual. La música de Thomas Tallis, un compositor inglés del siglo XVI, resonó en la Capilla, añadiendo un aire solemne y reverente a la ceremonia. La presencia de los frescos de Miguel Ángel y Botticelli en el fondo de la Capilla Sixtina proporcionó un contexto visual impresionante, recordando a los asistentes la rica historia del arte y la espiritualidad que este lugar encierra.
### Un Mensaje de Esperanza y Unidad
La oración conjunta fue precedida por una lectura de la Carta a los Romanos, realizada por la Ministra de Asuntos Exteriores británica, Yvette Cooper. Este acto no solo fue un momento de reflexión espiritual, sino también un símbolo de la colaboración entre las naciones y las religiones en la búsqueda de soluciones a los desafíos globales. La participación de los Coros de la Capilla Sixtina y otros coros de la realeza británica enriqueció aún más la experiencia, creando un ambiente de unidad y esperanza.
El rey Carlos III, al finalizar la ceremonia, se trasladó a la Sala Regia junto al Papa, donde se reunió con líderes de organizaciones climáticas y del sector privado que han estado trabajando en la Iniciativa de Mercados Sostenibles. Esta iniciativa, que el rey fundó como príncipe de Gales, busca fomentar prácticas sostenibles y responsables en el uso de los recursos naturales, un tema que ha cobrado relevancia en la agenda global.
El evento fue descrito por el reverendo anglicano James Hawkey como un momento de sanación histórica, un paso hacia la reconciliación entre dos tradiciones que han estado separadas durante siglos. La ceremonia no solo fue un acto religioso, sino también un llamado a la acción para abordar los problemas que afectan al planeta, destacando la responsabilidad compartida de todos los líderes, tanto religiosos como políticos, en la protección del medio ambiente.
La importancia de este encuentro radica en su capacidad para inspirar a otros a seguir el ejemplo de unidad y colaboración. En un mundo donde las divisiones parecen ser cada vez más pronunciadas, la oración conjunta de León XIV y Carlos III ofrece un rayo de esperanza, mostrando que el diálogo y la cooperación son posibles, incluso entre las instituciones más antiguas y arraigadas.
Este evento histórico no solo marca un nuevo capítulo en la relación entre la Iglesia católica y la anglicana, sino que también establece un precedente para futuras colaboraciones en temas de interés común, como la justicia social, la paz y la sostenibilidad. La Capilla Sixtina, con su rica historia y su significado espiritual, se convierte así en un símbolo de esperanza y unidad en tiempos de incertidumbre.
