La Agencia de Protección Civil de la Generalitat de Cataluña ha programado un simulacro de alerta por riesgo químico en el área metropolitana de Barcelona, que se llevará a cabo el miércoles por la mañana. Este ejercicio tiene como objetivo evaluar la efectividad de los sistemas de alerta y la capacidad de respuesta de la población ante situaciones de emergencia. Se espera que más de medio millón de personas se vean afectadas por esta prueba, que incluirá el envío de mensajes de alerta a teléfonos móviles y el sonido de sirenas en diversas localidades.
**Detalles del Simulacro y su Alcance**
El simulacro comenzará a las 10 de la mañana, momento en el que se enviarán los primeros avisos a los teléfonos móviles de los residentes en las áreas afectadas. Además, se activarán 50 sirenas en zonas cercanas a industrias químicas en 22 municipios, incluyendo la Zona Franca y el Puerto de Barcelona, así como una parte significativa de Hospitalet de Llobregat y otras localidades del Baix Llobregat, Vallès Occidental y Vallès Oriental.
La activación de las sirenas se realizará en diferentes municipios, afectando a una población censada de aproximadamente 496,247 habitantes. En el Baix Llobregat, se activarán 26 sirenas, que impactarán a la mitad de la población de Viladecans y a todos los residentes de Cornellà, El Prat, Sant Boi, entre otros. En el Vallès Occidental, se activarán 9 sirenas, y en el Vallès Oriental, 7 sirenas. Este ejercicio también incluirá la participación de 36 escuelas, que se verán involucradas en el simulacro.
La población que trabaja en los polígonos industriales afectados también será parte de este ejercicio, con más de 50,000 trabajadores en áreas como Mercabarna y la Zona Franca. Además, se anticipa que el simulacro afectará el tráfico en la zona, incluyendo importantes autovías como las Rondas de Barcelona y la AP-7, aunque no se ha estimado el número exacto de vehículos que podrían verse involucrados.
**Procedimiento de Alerta y Recomendaciones para la Población**
A las 10:00 horas, se enviará un mensaje de alerta a través del sistema Es-alert, que llegará a los móviles de aquellos que se encuentren en las cercanías de las antenas activadas. Este mensaje servirá para notificar el inicio del simulacro. Inmediatamente después, comenzarán a sonar las sirenas, que emitirán un sonido ondulante, similar al de una ambulancia, durante un minuto, con pausas de cinco segundos entre cada señal. Este sonido está diseñado para ser claramente audible en el exterior.
La recomendación de Protección Civil es que la población se confine en el lugar más cercano, cerrando puertas y ventanas, desconectando sistemas de ventilación y esperando instrucciones adicionales. Si se encuentra en un vehículo, se aconseja buscar refugio en un edificio cerrado. Después de aproximadamente diez minutos, se activarán las sirenas para indicar el fin del confinamiento, seguido de un nuevo mensaje en los móviles que informará sobre la finalización de la prueba y proporcionará un enlace para una encuesta anónima de evaluación.
La duración total del simulacro está prevista en unos 15 minutos. Es importante destacar que la zona afectada por las sirenas y las antenas de telefonía no coincide completamente, lo que significa que en un escenario real, la población cercana estará informada sobre el riesgo químico y podrá tomar decisiones informadas sobre su seguridad.
La delegada de la Generalitat en Barcelona, Pilar Díaz, ha enfatizado que estos simulacros son cruciales para probar la efectividad del sistema de alerta y para educar a la población sobre cómo actuar en caso de una emergencia real. La directora general de Protección Civil, Marta Cassany, ha subrayado la importancia de la difusión de la prueba para evitar que la población entre en pánico al recibir los mensajes o escuchar las sirenas. Este tipo de ejercicios son fundamentales para garantizar la seguridad de los ciudadanos y mejorar la coordinación en situaciones de emergencia.