El mundo del fútbol español ha sido testigo de un cambio significativo con la reciente salida de Santi Denia como seleccionador de las categorías sub-21 y olímpica. Después de 15 años de dedicación y logros en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Denia ha decidido emprender un nuevo camino profesional, dejando atrás una trayectoria marcada por éxitos y momentos memorables. Su renuncia se produce tras la eliminación de la selección sub-21 en los cuartos de final del Europeo, donde España fue derrotada por Inglaterra, un partido que dejó una profunda huella en el técnico y en los aficionados.
### Trayectoria de Santi Denia en la RFEF
Santi Denia se unió a la RFEF en agosto de 2010, comenzando su carrera como entrenador de la selección sub-16. Desde entonces, su ascenso ha sido meteórico. En 2011, asumió el mando de la sub-17, donde logró un hito importante al ganar el Europeo sub-17 en 2017 en Croacia. Este triunfo fue solo el comienzo de una serie de éxitos que continuaron con la selección sub-19, que bajo su dirección alcanzó la cima en 2019 en Armenia.
En total, Denia ha dirigido a las categorías inferiores de la selección española en 220 partidos, distribuidos de la siguiente manera: diez con la sub-15, 16 con la sub-16, 105 con la sub-17, 14 con la sub-18, 39 con la sub-19, 30 con la sub-21 y seis con la selección olímpica. Su experiencia y conocimiento del juego han sido fundamentales para el desarrollo de jóvenes talentos en el fútbol español.
Además de sus logros en las categorías inferiores, Denia también dejó su huella en el fútbol olímpico. En los Juegos Olímpicos de París 2024, logró colgarse la medalla de oro, un logro que se suma a la plata obtenida en Tokio 2020 como segundo entrenador. Estos éxitos han cimentado su reputación como uno de los entrenadores más prometedores del fútbol español.
### La Decisión de Emprender Nuevos Retos
La decisión de Santi Denia de dejar su puesto en la RFEF no ha sido fácil. En una entrevista previa a la final olímpica, el técnico ya había insinuado su deseo de explorar nuevas oportunidades en el fútbol, afirmando que no planeaba quedarse en la selección para siempre. «Siempre he tenido curiosidad por dirigir a un club. Cuando llegue el momento, habrá que salir. No me voy a quedar aquí toda la vida, eso lo tengo claro», declaró en agosto de 2024. Esta reflexión muestra su deseo de crecimiento personal y profesional, así como su ambición de enfrentar nuevos desafíos.
La salida de Denia se produce en un momento crucial para la selección sub-21, que se prepara para un nuevo ciclo con el Europeo de 2027 en el horizonte, un torneo que otorgará plazas para los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. La RFEF ahora se enfrenta al reto de encontrar un nuevo seleccionador que continúe con el legado de Denia y que esté a la altura de las expectativas.
Entre los nombres que suenan para ocupar el puesto, se encuentra Paco Gallardo, actual entrenador de la sub-19, quien está en la disputa por el título del Europeo de su categoría. Otro candidato destacado es Raúl González Blanco, exfutbolista del Real Madrid, quien recientemente dejó su cargo en el Real Madrid Castilla tras seis temporadas. La elección del nuevo técnico será crucial para el futuro del fútbol juvenil en España y para el desarrollo de nuevos talentos que representen al país en competiciones internacionales.
La despedida de Santi Denia ha sido emotiva. Tras la derrota ante Inglaterra, el técnico se mostró visiblemente afectado, caminando solo entre lágrimas en el campo, consciente de que su etapa en la RFEF había llegado a su fin. En el video que se publicó para anunciar su marcha, Denia expresó su gratitud: «He sido un privilegiado. Ha sido todo muy bonito». Estas palabras reflejan no solo su amor por el fútbol, sino también el impacto que ha tenido en la vida de muchos jóvenes futbolistas que han pasado por sus manos.
La salida de Santi Denia marca el final de una era en el fútbol juvenil español, pero también abre la puerta a nuevas oportunidades y desafíos. La RFEF ahora tiene la responsabilidad de encontrar un sucesor que continúe el trabajo de desarrollo y formación de jóvenes talentos, asegurando que España siga siendo una potencia en el fútbol internacional.