La reciente visita de cinco miembros de la Comisión de Venecia al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha reavivado el debate sobre el sistema de elección de los vocales de este órgano. Este encuentro, que tuvo lugar el 15 de septiembre de 2025, se produce en un contexto de tensiones entre el Ejecutivo y los sectores más conservadores del Poder Judicial. Durante su visita, los expertos en derecho constitucional se reunieron con vocales del CGPJ, magistrados del Tribunal Supremo y representantes de asociaciones de jueces, buscando entender las diferentes perspectivas sobre el modelo español de elección de vocales.
La Comisión de Venecia, un órgano consultivo del Consejo de Europa, tiene como objetivo promover la democracia y el estado de derecho en sus estados miembros. En esta ocasión, su visita fue solicitada por la presidenta del CGPJ y del Tribunal Supremo, Isabel Perelló, tras la falta de consenso en el Pleno del Consejo sobre un modelo de elección que debía ser propuesto al Congreso. Este desacuerdo se ha intensificado debido a las críticas del presidente del Gobierno, quien ha señalado a ciertos jueces, lo que ha llevado a los vocales conservadores a argumentar que es necesario reformar el sistema actual.
### La Propuesta Conservadora y el Modelo Progresista
Los vocales del sector conservador han propuesto un modelo en el que los 12 vocales jueces sean elegidos por sus pares, sin intervención del Parlamento. Esta propuesta se alinea con la postura del Partido Popular, liderado por Alberto Núñez Feijóo, que ha defendido la necesidad de un sistema más autónomo y menos influenciado por la política. Por otro lado, los vocales progresistas abogan por mantener el modelo actual, que consideran fundamental para preservar la voluntad popular, la cual se expresa a través de las Cortes.
Este enfrentamiento entre ambos sectores refleja no solo una lucha por el control del CGPJ, sino también una batalla ideológica más amplia sobre el papel de la justicia en la política española. Los conservadores argumentan que el actual sistema de elección ha llevado a un debilitamiento de la independencia judicial, mientras que los progresistas sostienen que cualquier cambio podría abrir la puerta a una mayor politización del Poder Judicial.
La visita de la Comisión de Venecia se produce en un momento crítico, ya que se espera que en octubre se lleve a cabo un debate sobre el modelo español de elección de vocales. Este debate será crucial para determinar el futuro del CGPJ y su capacidad para operar de manera independiente. Los miembros de la Comisión, que incluyen a expertos de Italia, Suiza y Francia, están en España para escuchar las diferentes visiones y aportar su experiencia en la materia.
### Contexto Político y Judicial en España
La situación actual del CGPJ no es aislada, sino que forma parte de un contexto político más amplio en España. La falta de acuerdo entre el PSOE y el PP sobre la composición del CGPJ ha llevado a un estancamiento que ha durado años. Este desacuerdo ha sido exacerbado por la polarización política en el país, donde cada decisión judicial se ve a menudo a través de la lente de la política partidista.
El enfrentamiento entre el Ejecutivo y los sectores conservadores del Poder Judicial ha llevado a un clima de desconfianza y tensión. Las críticas del presidente del Gobierno a ciertos jueces han sido interpretadas por los conservadores como un ataque a la independencia judicial, lo que ha llevado a un llamado a la reforma del sistema de elección. Este contexto ha hecho que la visita de la Comisión de Venecia sea aún más relevante, ya que su evaluación podría influir en las decisiones futuras sobre la estructura del CGPJ.
La necesidad de una reforma en el sistema de elección de vocales es un tema que ha sido discutido durante años, pero la falta de consenso ha impedido cualquier avance significativo. La intervención de la Comisión de Venecia podría ser un paso hacia la búsqueda de un modelo que satisfaga a ambas partes y que, al mismo tiempo, garantice la independencia del Poder Judicial en España.
La discusión sobre el futuro del CGPJ es, por tanto, un reflejo de las tensiones más amplias en la política española. La forma en que se resuelva este debate no solo afectará a la estructura del CGPJ, sino que también tendrá implicaciones para la confianza pública en el sistema judicial y en la democracia en general. A medida que se acercan las reuniones en el Senado y los encuentros con diferentes grupos parlamentarios, la atención se centrará en cómo se desarrollará este debate y qué modelo finalmente se propondrá al Congreso.