Las inundaciones han sido un problema recurrente en diversas regiones de España, y l’Horta Sud no es la excepción. En respuesta a los devastadores episodios de inundaciones, como el ocurrido el 29 de octubre de 2024, la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha comenzado a implementar un sistema de alerta temprana que busca mejorar la gestión de estos desastres naturales. Este sistema, que se encuentra en fase piloto, tiene como objetivo principal anticipar y mitigar los efectos de futuras inundaciones, protegiendo así a la población y a las infraestructuras de la zona.
La CHJ ha presentado un Plan de mejora de la resiliencia frente a inundaciones, que incluye una inversión de 530 millones de euros en grandes obras hidráulicas. Estas obras están diseñadas para reducir el impacto de las inundaciones y mejorar la capacidad de respuesta ante episodios de lluvia intensa. En este contexto, se están llevando a cabo reparaciones de emergencia por un valor de 220 millones de euros, enfocadas en restaurar el Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH), que es crucial para la gestión de recursos hídricos en la región.
El nuevo sistema de alerta temprana se basa en la integración de datos meteorológicos e hidrológicos en tiempo real. Esto permitirá a las autoridades anticipar cambios en los caudales de los ríos y barrancos, optimizando así la gestión de los embalses y mejorando la capacidad de laminación de las aguas. La CHJ está trabajando en colaboración con diversas instituciones, como AEMET y el Instituto de Ingeniería del Agua y Medio Ambiente de la Universidad Politécnica de Valencia, para desarrollar modelos predictivos que faciliten la toma de decisiones en situaciones de emergencia.
### Implementación de Modelos Predictivos
Uno de los aspectos más innovadores de este sistema es el uso de modelos de predicción desarrollados en Estados Unidos, específicamente el HEC-HMS, que se integrará en la plataforma Delft-FEWS. Esta plataforma permitirá crear un visor operativo que facilitará la gestión de inundaciones, proporcionando información crucial para la toma de decisiones. La CHJ tiene la intención de ampliar este sistema en el futuro, cubriendo toda la Demarcación Hidrográfica del Júcar, lo que reforzará la capacidad de anticipación y respuesta ante inundaciones.
La falta de un sistema de alerta temprana ha sido un punto de crítica hacia la CHJ, especialmente en comparación con otras confederaciones, como la del Ebro, que ya cuentan con sistemas de ayuda a la decisión. En una reciente comisión sobre la dana en el Senado, se discutió la importancia de contar con herramientas que permitan gestionar de manera más eficiente las inundaciones. Un experto del Ministerio para la Transición Ecológica explicó cómo su sistema de ayuda a la decisión funciona como un semáforo, regulando las acciones a tomar según las precipitaciones y la información disponible.
La CHJ busca implementar un sistema similar, que combine datos pluviométricos, sensores de caudales y cartografía de zonas de riesgo, entre otros. Esta integración de información es fundamental para anticipar decisiones y evitar que las avenidas de agua se conviertan en desastres. La capacidad de prever y gestionar las inundaciones no solo es crucial para la seguridad de los ciudadanos, sino también para la protección de las infraestructuras y el medio ambiente.
### Desafíos y Oportunidades
A pesar de los avances en la implementación del sistema de alerta temprana, existen desafíos significativos que deben abordarse. La coordinación entre diferentes organismos y la integración de datos de diversas fuentes son aspectos críticos que determinarán la efectividad del sistema. Además, es fundamental que la población esté informada y educada sobre cómo actuar en caso de inundaciones, lo que requiere campañas de sensibilización y formación.
La inversión en infraestructura hidráulica y en tecnología de predicción es una oportunidad para no solo mejorar la gestión de inundaciones, sino también para fomentar el desarrollo sostenible en la región. La implementación de estas medidas puede contribuir a la creación de un entorno más resiliente, capaz de enfrentar los desafíos que el cambio climático presenta. La colaboración entre instituciones, la inversión en tecnología y la educación de la población son elementos clave para construir un futuro más seguro en l’Horta Sud.
En resumen, la CHJ está dando pasos significativos hacia la mejora de la gestión de inundaciones en l’Horta Sud. Con la implementación de un sistema de alerta temprana y la colaboración con diversas instituciones, se espera que la región esté mejor preparada para enfrentar futuros episodios de inundaciones, protegiendo así a la población y a las infraestructuras de la zona.