La literatura española ha sido testigo de la resurrección de una obra que, aunque permaneció oculta durante años, ha logrado salir a la luz gracias a la valentía de una pequeña editorial. ‘Lo absurdo’, la novela del escritor madrileño Javier Pastor, es un testimonio de las complejidades del panorama editorial actual y de las luchas internas que enfrentan los autores en su búsqueda por ser reconocidos. Publicada póstumamente en 2025, esta obra se convierte en un espejo que refleja las vanidades, deudas y resentimientos que caracterizan a un sector en constante transformación.
La historia detrás de ‘Lo absurdo’ es tan intrigante como su contenido. En 2019, los representantes de Pastor decidieron que la novela era «carne de demanda legal», lo que llevó a que el manuscrito quedara guardado en un cajón hasta su publicación final. Esta decisión, aunque controvertida, subraya la tensión que existe entre la creatividad literaria y las exigencias del mercado. La novela, que se centra en el crítico literario Perico Collazo, explora cómo las críticas pueden tener un impacto devastador en la vida de los escritores, un tema que Pastor conocía de primera mano.
La figura de Perico Collazo es central en la narrativa de ‘Lo absurdo’. Este personaje, que se enfrenta a las consecuencias de sus propias críticas, se convierte en un símbolo de la crueldad que a menudo se encuentra en el mundo literario. La obra no solo es una reflexión sobre la crítica literaria, sino también una exploración de la identidad del autor y de cómo las opiniones ajenas pueden moldear la percepción pública de su trabajo. En un pasaje revelador, Pastor escribe: «Nuestra escritura es producto de una decisión profundamente íntima, voluntaria y por ende vivimos de otros ingresos…». Esta frase encapsula la lucha de muchos escritores que deben equilibrar su pasión por la literatura con la necesidad de ganarse la vida.
El humor es otro elemento clave en ‘Lo absurdo’. A través de un lenguaje rico en neologismos y un tono corrosivo, Pastor logra crear una obra que, a pesar de su crítica mordaz, también ofrece momentos de ternura y autocrítica. La habilidad del autor para mezclar el humor con la crítica social es lo que hace que esta novela sea tan cautivadora. El lector se encuentra riendo y reflexionando al mismo tiempo, lo que demuestra la maestría de Pastor como narrador.
El amor de Javier Pastor por Madrid también se manifiesta en esta obra. La ciudad no es solo un telón de fondo, sino un personaje en sí mismo que influye en las vidas de los protagonistas. A través de diálogos vibrantes y descripciones vívidas, el lector puede sentir la esencia de Madrid, una ciudad que Pastor siempre consideró su hogar. Este amor por la ciudad se entrelaza con la narrativa, creando una atmósfera que es tanto familiar como evocadora.
La publicación de ‘Lo absurdo’ ha sido posible gracias a la dedicación de Ediciones del Azar, una pequeña editorial que ha demostrado que la valentía y el coraje pueden llevar a la luz obras que, de otro modo, habrían permanecido en la oscuridad. La amistad entre Pastor y Enrique Gil-Delgado fue fundamental para que esta novela viera la luz, y su historia es un recordatorio de la importancia de las conexiones humanas en el mundo literario. Gil-Delgado, como intermediario, jugó un papel crucial en la publicación de esta obra, asegurando que Pastor pudiera tenerla en sus manos antes de su fallecimiento.
‘Lo absurdo’ no solo es una crítica a la crítica literaria, sino también un homenaje a la lucha de los escritores por encontrar su voz en un mundo que a menudo parece estar en su contra. Con 318 páginas que invitan a la reflexión, esta novela se posiciona como una de las obras más importantes de la literatura contemporánea en español. A través de su narrativa, Pastor nos recuerda que, a pesar de las adversidades, la escritura sigue siendo un acto de resistencia y una forma de expresión profundamente humana.
En un momento en que la literatura enfrenta desafíos sin precedentes, ‘Lo absurdo’ se erige como un faro de esperanza y un testimonio de la resiliencia de los escritores. La obra de Javier Pastor es un recordatorio de que, aunque la crítica puede ser despiadada, la pasión por contar historias siempre encontrará su camino hacia la luz.