La Fundación Internacional de Apoyo al Desarrollo Local y Social, conocida como Fiadelso, se encuentra en el centro de una investigación judicial que ha suscitado gran interés mediático y político en España. Esta entidad, fundada en 1992 por José Luis Ábalos, exministro de Transportes, ha sido objeto de denuncias por la falta de transparencia en la gestión de sus cuentas y la posible malversación de fondos. A medida que avanza la investigación, surgen preguntas sobre la relación entre la fundación y el exministro, así como sobre la implicación de otros actores políticos en este escándalo.
La Abogacía de la Generalitat Valenciana ha denunciado que Fiadelso no ha presentado la liquidación de sus cuentas, a pesar de haber pasado un tiempo considerable desde que se solicitó su cumplimiento. Esta situación ha llevado a la Generalitat a recurrir al Tribunal Supremo para que la fundación justifique el uso de los fondos que ha recibido a lo largo de su existencia. La falta de claridad en las cuentas de Fiadelso ha generado un ambiente de sospecha, especialmente considerando que la fundación ha estado bajo la lupa de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que investiga un caso de corrupción que involucra a Ábalos y otros miembros del PSOE.
### La trayectoria de Fiadelso y su relación con Ábalos
Fiadelso fue creada con el objetivo de apoyar a los países en desarrollo mediante la ejecución de programas de ayuda. Sin embargo, a lo largo de los años, su actividad ha disminuido notablemente, coincidiendo con el ascenso político de Ábalos en Madrid. La fundación, que comenzó con un capital inicial de 12.126 euros, ha sido acusada de opacidad en su gestión financiera, lo que ha llevado a la Agencia Valenciana Antifraude a abrir un expediente en su contra.
Las investigaciones han revelado que la UCO tiene autorización judicial para examinar no solo las cuentas bancarias de Fiadelso, sino también sus movimientos inmobiliarios y donaciones. De las cuatro cuentas que están bajo escrutinio, dos han sido cerradas, mientras que las otras dos siguen activas. Esto plantea interrogantes sobre la posible existencia de pagos no registrados y la falta de transparencia en la gestión de la fundación.
Además, se ha descubierto que las cuentas de Fiadelso correspondientes a varios años no están depositadas en el Registro de Fundaciones, lo que ha sido señalado como una grave irregularidad. La falta de documentación y la ausencia de informes contables han alimentado las sospechas de que la fundación podría haber estado involucrada en actividades ilícitas, incluyendo la recepción de mordidas a cambio de contratos públicos.
### Implicaciones políticas y reacciones dentro del PSOE
El escándalo ha tenido repercusiones significativas dentro del PSOE, donde algunos miembros han comenzado a distanciarse de Ábalos y de la fundación. La metáfora de los «monos que caen del árbol» ha circulado entre los socialistas, sugiriendo que aquellos que alguna vez apoyaron a Ábalos ahora buscan desvincularse de su legado. Esta dinámica ha generado tensiones internas en el partido, especialmente en un momento en que la corrupción se ha convertido en un tema candente en la política española.
La investigación también ha puesto de relieve la relación de Ábalos con Koldo García, un personaje clave en la trama de corrupción. Se ha revelado que la hija de Ábalos, Tatiana, estuvo en contacto con García para solicitar pagos atrasados relacionados con la fundación. Este tipo de interacciones ha llevado a los investigadores a sospechar que los flujos de dinero a través de Fiadelso podrían haber sido más frecuentes de lo que se había admitido públicamente.
La situación se complica aún más con la existencia de propiedades vinculadas a Ábalos, incluyendo un inmueble en Perú que, aunque registrado a su nombre, está asociado a la fundación. Esto ha generado más preguntas sobre la gestión de los activos de Fiadelso y su relación con la carrera política de Ábalos.
A medida que la UCO continúa su investigación, el futuro de Fiadelso y de su fundador se torna incierto. La falta de claridad en las cuentas y la creciente presión política podrían tener consecuencias significativas para el exministro y su partido. La situación actual refleja un momento crítico en la política española, donde la corrupción y la transparencia se han convertido en temas de debate cruciales para la ciudadanía.