La Fiscalía de Sevilla ha iniciado una investigación tras la denuncia presentada por la Asociación Amama, que alega un supuesto «borrado y manipulación de pruebas diagnósticas» en el sistema de salud pública andaluz. Este caso ha generado una gran preocupación entre las mujeres que dependen de estos servicios para el diagnóstico y tratamiento del cáncer de mama. La denuncia fue presentada el 21 de octubre y ha llevado a la Fiscalía a abrir diligencias para esclarecer la situación.
La investigación se centra en dos aspectos principales: por un lado, se está analizando el proceso de cribado de cáncer de mama y las acciones que está tomando la Junta de Andalucía para corregir posibles fallos en el sistema. Por otro lado, se investiga la denuncia específica sobre la manipulación de mamografías y ecografías, que son cruciales para el diagnóstico temprano de esta enfermedad.
La presidenta de Amama, Ángela Claverol, se presentó en los juzgados de Sevilla para formalizar la denuncia y ha expresado su preocupación por lo que considera un posible delito de obstrucción a la justicia. Según Claverol, muchas mujeres han reportado que sus pruebas han desaparecido o que se ha borrado información crítica, como el nombre del radiólogo que realizó el diagnóstico. Esta situación ha llevado a la asociación a solicitar una investigación exhaustiva para garantizar que todas las pruebas diagnósticas sean accesibles y que se mantenga la integridad de los datos médicos.
El consejero de Sanidad de la Junta de Andalucía, Antonio Sanz, ha desmentido las acusaciones de manipulación y ha asegurado que no se están eliminando pruebas ni historias clínicas. Sin embargo, ha admitido que hubo una «caída informática puntual» en el sistema, lo que podría haber dificultado el acceso a las pruebas médicas. La Junta ha afirmado que el problema fue solucionado rápidamente y que todas las pacientes deberían poder acceder a sus pruebas a través de la plataforma ClicSalud.
### Cambios en la Terminología de Resultados
Uno de los puntos más controvertidos de la denuncia es el cambio en la terminología utilizada para clasificar los resultados de las mamografías. Según Amama, antes los resultados se clasificaban como «sospechosos» o «dudosos», lo que correspondía a la clasificación BIRADS-3. Sin embargo, ahora se ha cambiado a la terminología «probablemente benigno», lo que podría generar confusión y preocupación entre las pacientes que buscan claridad sobre su estado de salud.
La asociación ha señalado que este cambio en la terminología podría afectar la percepción de riesgo de las pacientes y su decisión de buscar atención médica adicional. La Junta de Andalucía ha defendido que este cambio es parte de un esfuerzo por mejorar la comunicación de los resultados y que no implica un cambio en la calidad de la atención médica proporcionada.
La Junta ha emitido un comunicado explicando que en el proceso de lectura de las mamografías participan dos radiólogos, quienes no conocen el informe del otro lector. Esto se hace para garantizar la precisión en la detección de lesiones. Durante este proceso, un radiólogo puede generar una «imagen clave», que es una copia de una de las proyecciones de la mamografía con áreas de interés señaladas. Este documento es interno y se utiliza para facilitar la valoración por parte de otro especialista.
La controversia ha llevado a un aumento en la preocupación entre las mujeres que dependen de estos servicios. Muchas están exigiendo una mayor transparencia en el proceso de diagnóstico y tratamiento del cáncer de mama, así como una revisión de los protocolos actuales para garantizar que no haya más incidentes de este tipo en el futuro.
### Reacciones y Consecuencias
La denuncia de Amama ha generado un amplio debate en la sociedad andaluza sobre la calidad y la transparencia del sistema de salud pública. Las mujeres afectadas han comenzado a organizarse para exigir respuestas y garantías de que sus datos médicos están protegidos y que recibirán la atención que necesitan. La situación ha puesto de relieve la importancia de la confianza en el sistema de salud, especialmente en un área tan crítica como el diagnóstico del cáncer.
La Fiscalía de Sevilla continuará investigando las denuncias y se espera que se tomen medidas para garantizar que todas las pruebas diagnósticas sean accesibles y que se mantenga la integridad de los datos médicos. La situación actual ha resaltado la necesidad de una revisión exhaustiva de los sistemas de salud pública y de los protocolos de manejo de datos médicos para evitar que incidentes similares ocurran en el futuro.
La comunidad médica y las organizaciones de pacientes están observando de cerca el desarrollo de esta investigación, ya que sus resultados podrían tener un impacto significativo en la forma en que se manejan las pruebas diagnósticas en Andalucía y en otras regiones del país.
