El presidente del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, ha presentado recientemente su plan de inmigración, el cual se centrará en la centralización de las competencias relacionadas con esta materia dentro del Gobierno español. En una entrevista, Feijóo destacó que actualmente existen cinco ministerios bajo el Gobierno de Pedro Sánchez que manejan aspectos de la inmigración, pero ninguno parece estar cumpliendo con su función de manera efectiva. Esta situación ha llevado al líder del PP a proponer un enfoque más ordenado y humano en la gestión de la inmigración, un tema que ha escalado en su agenda política desde la vuelta del verano.
La propuesta de Feijóo incluye la creación de un sistema de visados por puntos, similar al que utilizan países como Australia, Canadá y el Reino Unido. Este sistema evaluaría a los inmigrantes en función de diversos criterios, siendo el conocimiento del idioma uno de los más relevantes. Feijóo ha enfatizado que saber español debería ser un requisito fundamental para quienes deseen establecerse en España, argumentando que es una norma común en otros países. Sin embargo, su propuesta también ha generado controversia, especialmente en lo que respecta a la consideración de los inmigrantes de origen hispanoamericano, a quienes ha calificado como extranjeros según la ley de extranjería.
### Propuestas Clave en el Plan de Inmigración
Uno de los puntos más destacados del plan de Feijóo es la intención de recortar ciertas ayudas sociales a los inmigrantes, específicamente el Ingreso Mínimo Vital (IMV). Según el líder del PP, esta ayuda debería estar vinculada a la búsqueda activa de empleo, lo que implica que aquellos que no hayan trabajado en el último año no deberían tener acceso a ella. Esta postura ha suscitado un intenso debate sobre la responsabilidad social del Estado y la necesidad de equilibrar la ayuda a los inmigrantes con la promoción de su integración en el mercado laboral.
Feijóo ha utilizado ejemplos históricos para respaldar su enfoque, mencionando la emigración masiva de españoles en las décadas de 1960 y 1970 hacia países como Alemania y Argentina. En esos casos, los emigrantes contaban con contratos de trabajo, lo que facilitaba su integración en las sociedades de acogida. Esta comparación busca establecer un paralelismo entre la emigración española del pasado y la inmigración actual, sugiriendo que un enfoque más riguroso podría beneficiar tanto a los inmigrantes como a la economía española.
### Críticas y Reacciones a la Propuesta
La propuesta de centralización de competencias en inmigración ha sido recibida con críticas por parte de varios sectores. Algunos argumentan que la centralización podría llevar a una gestión más burocrática y menos flexible, lo que podría complicar la vida de aquellos que buscan refugio o una nueva oportunidad en España. Además, la idea de un visado por puntos ha sido cuestionada por su posible exclusión de ciertos grupos de inmigrantes que, aunque no cumplan con todos los criterios, podrían aportar valor a la sociedad española.
Por otro lado, la postura de Feijóo sobre el IMV ha generado un debate sobre la ética de las políticas de inmigración. Muchos defensores de los derechos humanos argumentan que recortar ayudas a los inmigrantes podría agravar la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran, lo que contradice los principios de humanidad y solidaridad que deberían guiar la política migratoria de un país.
En este contexto, la propuesta de Feijóo se enmarca en un escenario político donde la inmigración se ha convertido en un tema candente, especialmente en un momento en que las elecciones generales se acercan. La estrategia del PP parece ser atraer a un electorado que se siente preocupado por la inmigración y la seguridad, utilizando un discurso que enfatiza la necesidad de orden y control en la llegada de nuevos ciudadanos.
La respuesta del PSOE y de otros partidos de izquierda ha sido crítica, acusando a Feijóo de utilizar la inmigración como un tema de campaña para desviar la atención de otros problemas sociales y económicos que enfrenta el país. La polarización del debate sobre la inmigración en España refleja una tendencia más amplia en Europa, donde muchos países están lidiando con la llegada de inmigrantes y refugiados en un contexto de crisis humanitaria.
En resumen, la propuesta de Feijóo sobre la centralización de competencias en inmigración y su enfoque en un sistema de visados por puntos marcan un cambio significativo en la política del PP. A medida que se acercan las elecciones, será interesante observar cómo evoluciona este debate y qué impacto tendrá en la percepción pública sobre la inmigración en España.