La investigación sobre la personalidad humana ha dado un giro interesante con la reciente tesis doctoral del psicólogo Jaime García-Fernández, quien ha explorado la noción de las personalidades «oscuras». Este concepto se refiere a aquellos rasgos de carácter que pueden llevar a las personas a actuar de manera egoísta o dañina hacia los demás. García-Fernández ha desarrollado una herramienta innovadora, la Batería de Evaluación de Rasgos Oscuros (BERO), que permite medir estos rasgos en la población general, no solo en individuos con antecedentes criminales.
### La Naturaleza de las Personalidades Oscuras
La investigación de García-Fernández revela que todos poseemos un lado oscuro, aunque en diferentes grados. En su tesis, el psicólogo describe cómo la maldad no es un rasgo fijo, sino un continuo que abarca desde comportamientos leves hasta actitudes más extremas. Según el autor, «la maldad no es algo que se tiene o no se tiene, es un continuo». Esto significa que, aunque algunas personas pueden exhibir rasgos más oscuros que otras, todos tenemos la capacidad de actuar de manera egoísta o insensible en ciertas circunstancias.
García-Fernández identifica nueve rasgos que caracterizan a las personalidades oscuras: autoritarismo, avaricia, crueldad, insensibilidad, incumplimiento, manipulación, soberbia, transgresión y venganza. Cada uno de estos rasgos se manifiesta de diferentes maneras y puede ser evaluado a través de la BERO, que consta de 74 ítems. Este enfoque permite una evaluación más precisa y matizada de la personalidad oscura en la población adulta de España.
El estudio también destaca que los hombres tienden a puntuar más alto en estos rasgos que las mujeres, lo que podría estar relacionado con la socialización de género. Los comportamientos que son considerados socialmente aceptables o incluso admirables en hombres, como la competitividad y la dureza, pueden contribuir a esta diferencia. Además, se observa que a medida que las personas envejecen, tienden a mostrar una disminución en estos rasgos, lo que sugiere que la madurez puede estar asociada con un comportamiento más empático y menos egoísta.
### Implicaciones de la Investigación
La BERO no solo es una herramienta académica, sino que también tiene aplicaciones prácticas en diversos contextos. García-Fernández sugiere que, con las adaptaciones adecuadas, esta herramienta podría ser utilizada en entornos clínicos, forenses y laborales. Por ejemplo, en el ámbito laboral, podría ayudar a identificar a candidatos que podrían presentar comportamientos problemáticos en el trabajo. Sin embargo, el autor también señala un desafío importante: dado que la BERO es un cuestionario autoinformado, existe la posibilidad de que los participantes respondan de manera que les haga parecer más favorables socialmente. Esto es especialmente relevante para aquellos que puntúan más alto en rasgos oscuros, ya que podrían tener una mayor capacidad para manipular sus respuestas.
La investigación de García-Fernández abre un diálogo sobre la complejidad de la naturaleza humana. En lugar de ver a las personas como inherentemente buenas o malas, su estudio sugiere que todos estamos en un espectro de comportamientos y actitudes. Esta perspectiva puede ser liberadora, ya que nos permite reconocer y aceptar nuestras propias imperfecciones y las de los demás.
En resumen, la tesis de Jaime García-Fernández no solo proporciona una nueva herramienta para evaluar la personalidad oscura, sino que también invita a una reflexión más profunda sobre la naturaleza humana. Al entender que todos poseemos un lado oscuro, podemos trabajar hacia una mayor empatía y comprensión en nuestras interacciones diarias. La investigación en este campo continúa siendo crucial para desentrañar los matices de la psicología humana y sus implicaciones en la vida cotidiana.