En el contexto político actual de Catalunya, el ascenso de partidos de extrema derecha como Vox y Aliança Catalana ha generado una gran preocupación entre las formaciones tradicionales. Con las elecciones municipales de 2027 a la vista, los partidos están buscando estrategias para frenar este fenómeno y recuperar la confianza de los votantes. A continuación, se analizan las diferentes tácticas que están implementando los principales actores políticos en la región.
**Desactivando el Apoyo a la Extrema Derecha**
El Partido Socialista de Catalunya (PSC) se encuentra en una posición privilegiada como el partido más votado en la región, pero no se siente seguro ante el crecimiento de la extrema derecha. Consciente de que las próximas elecciones municipales podrían resultar en un aumento de concejales para estos partidos, el PSC ha decidido adoptar un enfoque más cercano a la ciudadanía. La dirección del partido ha instado a sus miembros a involucrarse directamente con los vecinos, especialmente con aquellos que son más susceptibles a los mensajes de la extrema derecha. La idea es establecer vínculos y escuchar las preocupaciones de la gente, especialmente de los jóvenes, para ofrecer soluciones a sus problemas.
Además, el PSC está evaluando las estrategias de comunicación de Aliança y Vox en las redes sociales, buscando contrarrestar sus mensajes y evitar que se generen vacíos que puedan ser ocupados por estos partidos. La consigna es clara: «No podemos dejar agujeros, porque si no los ocupan otros». Esta estrategia de proximidad busca desactivar el apoyo a la extrema derecha mediante un contacto directo y efectivo con la ciudadanía.
**La Inquietud de Junts y la Respuesta de ERC**
Por otro lado, Junts, el partido liderado por Carles Puigdemont, se siente particularmente amenazado por el auge de Aliança Catalana, que parece captar a muchos de sus votantes. En respuesta a esta situación, un grupo de alcaldes de Junts ha solicitado una reunión con su secretario general, Jordi Turull, para expresar sus preocupaciones sobre la inmigración y la inseguridad, temas que consideran cruciales para recuperar el apoyo popular. Junts ha intentado abordar estos problemas a nivel nacional, pero la dirección del partido reconoce que necesitan una estrategia más efectiva a nivel local.
Mientras tanto, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) enfrenta la situación con una mezcla de resignación y determinación. Un dirigente del partido ha señalado que, aunque no pueden evitar el ascenso de la extrema derecha, deben centrarse en políticas públicas que mejoren la vida de los ciudadanos. La frustración política que se siente en la sociedad es un factor que ERC considera fundamental para entender el auge de estos partidos. Por ello, están apostando por mejorar la financiación y ofrecer soluciones concretas a los problemas de la ciudadanía.
**El Enfoque del Partido Popular y los Comuns**
El Partido Popular (PP) también está ajustando su estrategia para evitar la fuga de votos hacia Aliança. Su enfoque se centra en temas como la inmigración y la inseguridad, buscando atraer a votantes que podrían sentirse atraídos por el discurso de la extrema derecha. Un alcalde del PP ha afirmado que es crucial abordar estos problemas desde una perspectiva de «centralidad» para evitar que el voto se desplace hacia los extremos.
Por su parte, los Comuns han adoptado una postura firme en contra de la extrema derecha, abogando por un cordón democrático que aísle a estos partidos en cualquier esfera institucional. Su estrategia incluye no solo la confrontación con argumentos, sino también la promoción de políticas que aborden las necesidades reales de los barrios. La idea es conectar con los malestares de la ciudadanía y ofrecer soluciones efectivas, como políticas de vivienda asequible y programas de educación en la calle.
**La Fragmentación del Electorado y la Respuesta de Vox**
Vox, por su parte, ha encontrado en el auge de Aliança una oportunidad para consolidar su base de apoyo. Con un discurso centrado en la inmigración y la seguridad, Vox busca diferenciarse de Aliança al señalar su enfoque independentista. Este partido ha comenzado a atraer a votantes de otras comunidades autónomas, especialmente a aquellos que se sienten incómodos con la política de inmigración de Aliança. La estrategia de Vox se basa en la fragmentación del electorado independentista, lo que les permite posicionarse como una alternativa viable para aquellos que buscan un enfoque más duro en temas de inmigración.
**Combatir la Desinformación y el Odio**
La CUP ha identificado a Aliança Catalana como una manifestación del «trumpismo» en Catalunya, y su enfoque para combatir la extrema derecha se centra en desmontar sus argumentos y combatir la desinformación. Este partido aboga por construir un independentismo que sea «radicalmente democrático y cohesionador», centrado en los problemas reales del país en lugar de en las ocurrencias de líderes de extrema derecha en otras partes del mundo. La lucha contra el odio y la desinformación se ha convertido en un eje central de su estrategia, buscando movilizar a la ciudadanía en defensa de los derechos que consideran amenazados.
En resumen, el panorama político en Catalunya se encuentra en constante evolución, con los partidos tradicionales buscando adaptarse a un entorno cada vez más polarizado. Las estrategias varían desde la cercanía con la ciudadanía hasta la confrontación directa con la extrema derecha, reflejando la diversidad de enfoques que se están implementando para hacer frente a este desafío.