En el panorama político español, las relaciones entre los partidos son a menudo volátiles y sujetas a cambios drásticos. En este contexto, el Partido Popular (PP) ha tomado una decisión estratégica que ha llamado la atención: distanciarse del Partido Nacionalista Vasco (PNV) mientras busca acercamientos con Junts, el partido liderado por Carles Puigdemont. Esta dinámica no solo refleja las tensiones actuales entre estas formaciones, sino que también pone de manifiesto las complejidades de la política española en un momento de incertidumbre electoral.
La relación entre el PP y el PNV ha sido históricamente complicada. A pesar de momentos de cooperación, como cuando el PNV apoyó al PP en la aprobación de presupuestos, la memoria de la moción de censura que llevó a la caída de Mariano Rajoy en 2018 sigue pesando en la balanza. En ese entonces, el PNV decidió respaldar al PSOE, lo que dejó una huella profunda en la percepción que el PP tiene de los nacionalistas vascos. Este episodio, marcado por la condena del PP en el caso Gürtel, ha alimentado un resentimiento que ahora se traduce en un distanciamiento palpable.
### La Relación Tensa entre PP y PNV
Desde la llegada de Alberto Núñez Feijóo a la presidencia del PP, la relación con el PNV ha pasado a ser tensa. Feijóo ha dejado claro que no considera al PNV un aliado potencial, ni para una moción de censura ni para futuras elecciones generales. Esta postura se ha visto reforzada por el rechazo del PNV a apoyar a Feijóo como presidente, a pesar de que el PP ganó las elecciones en 2023. Para los populares, el PNV ha demostrado una y otra vez que, cuando se trata de elegir entre el PSOE y el PP, su preferencia se inclina hacia los socialistas.
El PP ha comenzado a utilizar esta distancia como una herramienta para fortalecer su imagen ante el electorado de centro-derecha en Euskadi. Fuentes del PP vasco han afirmado que el partido se presenta como el verdadero representante de los intereses de los autónomos y pequeños empresarios, en contraposición a un PNV que, según ellos, se pliega a la ideología socialista. Esta narrativa busca capitalizar el descontento hacia el PNV, especialmente en un contexto donde la corrupción es un tema sensible.
Además, el PP ha intensificado su discurso contra el PNV, acusándolo de complicidad con la corrupción del PSOE. Este enfoque no solo busca desgastar la imagen del PNV, sino que también intenta atraer a los votantes que se sienten frustrados con el actual gobierno. En este sentido, el PP ha comenzado a articular un discurso que asocia al PNV con prácticas corruptas, lo que podría tener un impacto significativo en las próximas elecciones.
### Acercamientos a Junts: Un Cambio de Estrategia
En contraste con la hostilidad hacia el PNV, el PP ha comenzado a mostrar un interés renovado en acercarse a Junts. Este cambio de estrategia es notable, dado que Junts ha sido un actor clave en la política catalana y ha mantenido una relación tensa con el PP en el pasado. Sin embargo, la situación actual ha llevado a Feijóo a considerar a Junts como un posible aliado en lugar de un adversario.
La relación más neutra entre el PP y Junts se ha evidenciado en la colaboración en iniciativas económicas en el Congreso. A pesar de la retórica dura que ha caracterizado la campaña del PP contra la ley de amnistía, los populares han encontrado puntos en común con Junts que les permiten avanzar en ciertos temas. Este enfoque pragmático podría ser una estrategia para construir una base de apoyo más amplia en un contexto político fragmentado.
Feijóo ha ofrecido a Puigdemont la posibilidad de «poner el contador a cero», lo que sugiere un deseo de reiniciar las relaciones y dejar atrás las hostilidades del pasado. Este tipo de acercamiento podría ser visto como un intento de consolidar una coalición que le permita al PP ganar terreno en un escenario electoral incierto.
La política española se encuentra en un momento de transformación, donde las alianzas y los distanciamientos pueden cambiar rápidamente. La estrategia del PP de distanciarse del PNV mientras busca acercamientos a Junts es un reflejo de esta realidad. A medida que se acercan las elecciones, será crucial observar cómo estas dinámicas evolucionan y qué impacto tendrán en el futuro político de España.