La llegada de la primavera no solo marca un cambio en el clima, sino que también trae consigo una serie de eventos y celebraciones que invitan a disfrutar de la vida al aire libre. Uno de los eventos más esperados de esta temporada es el Living Day, una jornada que combina la buena compañía, la gastronomía y, por supuesto, el vino. Este año, el evento se llevó a cabo en un ambiente festivo y acogedor, donde los asistentes pudieron disfrutar de una experiencia única que celebra la conexión entre amigos y la belleza de la primavera.
### Un Evento que Conecta y Celebra
El Living Day, que este año conmemora su quinto aniversario, se ha convertido en un referente en la agenda social de Madrid. Organizado por una conocida revista de estilo de vida, este evento de puertas abiertas busca inspirar y conectar a las personas a través de diversas actividades y talleres. Desde su inicio, ha reunido a marcas exclusivas y creativas que aportan su toque personal, creando un ambiente vibrante y lleno de energía.
Los asistentes al Living Day pudieron disfrutar de una jornada repleta de actividades, desde talleres de artesanía hasta degustaciones de productos gourmet. La música en vivo, interpretada por la banda The Third Floor, añadió un toque especial al evento, creando un ambiente festivo que invitaba a la conversación y a la celebración. La decoración del lugar, con patios adornados con olivos y sombrillas de rafia, proporcionó un refugio perfecto para disfrutar del sol primaveral.
### Vinos que Marcan la Diferencia
Uno de los aspectos más destacados del Living Day fue la selección de vinos ofrecidos por las Bodegas Montecillo, una bodega con más de 150 años de historia que ha sabido adaptarse a las tendencias actuales sin perder su esencia. La elección del vino es fundamental en cualquier celebración, y en esta ocasión, los asistentes pudieron degustar una variedad de caldos que se adaptan perfectamente a la temporada.
**Monteicillo Rosé 2023** fue uno de los favoritos del día. Este vino, elaborado con una mezcla de Tempranillo y Tempranillo Blanco, destaca por su frescura y su carácter afrutado. Con un color rosa pálido y aromas de frutas rojas y flores blancas, es el acompañante ideal para aperitivos y comidas al aire libre. Su ligereza lo convierte en una opción perfecta para maridar con arroces y pastas, haciendo de cada sorbo una experiencia refrescante.
Por otro lado, el **Monteicillo Blanco 2023** se presentó como una opción singular y diferente. Con una mezcla de Viura, Tempranillo Blanco y Sauvignon Blanc, este vino se fermenta en barricas de roble francés, lo que le otorga una cremosidad y volumen excepcionales. Sus notas florales y afrutadas, combinadas con un ligero tostado, lo hacen ideal para acompañar ensaladas frescas y aperitivos variados. Este vino, servido bien frío, es perfecto para esos momentos de encuentro y charla animada entre amigos.
No se puede hablar de vinos sin mencionar el **Monteicillo Crianza 2020**, un tinto que desafía la idea de que los vinos tintos son solo para el invierno. Este Crianza, que combina Tempranillo y Garnacha, ha sido envejecido durante 18 meses en barricas de roble americano, lo que le confiere una elegancia y profundidad inigualables. Con aromas de frutas del bosque y un toque de pan tostado, es el compañero ideal para carnes rojas y quesos curados, convirtiendo cualquier comida en una celebración de sabores.
### La Experiencia del Living Day
El Living Day no solo se trata de disfrutar de buenos vinos, sino de crear recuerdos y conexiones. La atmósfera del evento, llena de risas y conversaciones animadas, refleja la esencia de la primavera: un tiempo para celebrar la vida y las relaciones. Los asistentes, entre ellos amigos y familiares, compartieron momentos inolvidables, brindando por los éxitos y las nuevas experiencias que la temporada trae consigo.
La combinación de buena música, deliciosa comida y una selección de vinos excepcionales hizo del Living Day un evento memorable. La filosofía detrás de esta celebración es clara: la primavera es un momento para abrirse al mundo, disfrutar de la compañía de seres queridos y crear recuerdos que perduren en el tiempo.
En resumen, el Living Day se ha consolidado como un evento imprescindible en la agenda primaveral de Madrid, donde la buena compañía y el buen vino se unen para celebrar la vida. Con cada sorbo y cada risa compartida, los asistentes se despidieron del evento con la promesa de volver el próximo año, listos para disfrutar de otra jornada de celebración y conexión.