La ciudad de Barcelona se prepara para ser la sede de la tercera edición del Foro Económico y Social del Mediterráneo en 2026, un evento que busca revitalizar el papel del arco mediterráneo como un motor económico clave. Esta iniciativa, impulsada por Prensa Ibérica en colaboración con la Fundación ‘La Caixa’, tiene como objetivo abordar los desafíos que enfrenta la región y fomentar el intercambio de ideas entre líderes de diversas áreas.
La primera edición del foro se llevó a cabo en Valencia, y la segunda en Málaga, donde se discutieron temas cruciales como el estrés hídrico, la dificultad para encontrar vivienda y la masificación turística. Durante el evento en Málaga, que tuvo lugar el 17 y 18 de junio de 2025, se destacó la importancia de crear un espacio de diálogo entre diferentes ciudades del Mediterráneo, donde se puedan compartir experiencias y soluciones a problemas comunes.
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, expresó su satisfacción por el desarrollo del foro y cedió el testigo a su homólogo de Barcelona, Jaume Collboni. Durante su intervención, De la Torre elogió la calidad y ambición de los temas tratados, subrayando que Barcelona es una «gran ciudad mediterránea» de la que todos se sienten orgullosos. Por su parte, Collboni enfatizó la necesidad de encontrar fórmulas que permitan a los habitantes de las ciudades vivir y trabajar sin ser desplazados por el turismo o los altos precios de la vivienda.
### Desafíos Urbanos y Soluciones Propuestas
Uno de los principales temas que surgió durante el foro fue la necesidad de abordar la crisis de vivienda en las ciudades mediterráneas. Collboni propuso varias medidas para garantizar que los residentes puedan acceder a viviendas asequibles. Entre sus propuestas se incluyen políticas de retención de profesionales, el refuerzo de los servicios públicos y un urbanismo que contemple la sostenibilidad y la adaptación al cambio climático.
El alcalde de Barcelona también mencionó la importancia de establecer límites al turismo y a los precios de los alquileres, así como la revocación de licencias para pisos turísticos que no contribuyan al bienestar de la comunidad. Estas medidas buscan crear un equilibrio entre el desarrollo turístico y la calidad de vida de los residentes, un desafío que muchas ciudades mediterráneas enfrentan actualmente.
El foro también sirvió como plataforma para que los alcaldes de otras ciudades, como Cartagena, Valencia y Palma, compartieran sus experiencias y estrategias en la gestión de estos problemas. La colaboración entre ciudades es fundamental para encontrar soluciones efectivas y adaptadas a las realidades locales.
### Un Espacio para el Diálogo y la Innovación
El Foro Económico y Social del Mediterráneo no solo se centra en la vivienda y el turismo, sino que también aborda una variedad de temas económicos y sociales que afectan a la región. La dinámica del foro incluye reuniones a lo largo del año de varios consejos que trabajan en diferentes áreas, culminando en un simposio anual donde se presentan los avances y se discuten nuevas ideas.
Este enfoque colaborativo permite que las ciudades aprendan unas de otras y desarrollen estrategias innovadoras para enfrentar los desafíos comunes. La participación de académicos, empresarios y líderes comunitarios en el foro enriquece el debate y aporta diversas perspectivas sobre los problemas que se discuten.
El evento de 2026 en Barcelona promete ser un hito en la historia del foro, ya que se espera que atraiga a un número aún mayor de participantes y expertos. La ciudad catalana, conocida por su rica historia y su papel como centro cultural y económico, se posiciona como un lugar ideal para fomentar el diálogo y la cooperación entre las ciudades del Mediterráneo.
A medida que se acerca la fecha del evento, se espera que se definan más detalles sobre los temas específicos que se abordarán y los ponentes que participarán. La comunidad mediterránea está ansiosa por ver cómo este foro puede contribuir a la creación de un futuro más sostenible y próspero para la región.
El III Foro Económico y Social del Mediterráneo en Barcelona representa una oportunidad única para que las ciudades del arco mediterráneo se unan en la búsqueda de soluciones a los desafíos que enfrentan, reafirmando su compromiso con el desarrollo sostenible y la cooperación regional.