Las carreteras de Cataluña están experimentando un alarmante aumento en el número de víctimas mortales en accidentes de tráfico. Según los datos más recientes del Servei Català de Trànsit, entre el 1 de enero y el 31 de julio de este año, se han registrado 87 muertes en 81 siniestros, un incremento significativo en comparación con el mismo periodo del año anterior, que contabilizó 81 fallecimientos en 74 accidentes. Este repunte ha llevado a las autoridades a intensificar las medidas de prevención y control en las vías, especialmente durante los meses de verano, cuando el tráfico aumenta considerablemente debido a las operaciones salida y los fines de semana.
La inspectora Vanessa Bohé, subjefa de la División de Tráfico de los Mossos d’Esquadra, ha señalado que los controles de tráfico se han incrementado en un 15% respecto al año anterior. Estos controles están diseñados para detectar comportamientos de riesgo al volante, como distracciones, excesos de velocidad, y el consumo de alcohol y drogas. La presencia visible de agentes uniformados en las carreteras no solo busca sancionar infracciones, sino también disuadir a los conductores de adoptar actitudes peligrosas.
### Estrategias de Control y Prevención
Los Mossos d’Esquadra han implementado diversas estrategias para mejorar la seguridad vial en Cataluña. Además de los controles estáticos, se utilizan patrullas tanto uniformadas como de paisano, que permiten detectar conductas peligrosas en tiempo real. Estos agentes están equipados con vehículos camuflados, conocidos como ‘motos espía’, que cuentan con tecnología avanzada para captar infracciones. Una vez que se identifica a un conductor temerario, se alerta a una patrulla uniformada para que proceda a detenerlo y sancionarlo.
La preocupación por la seguridad en las carreteras no se limita a los controles visibles. Los Mossos también han comenzado a utilizar apoyo aéreo, como helicópteros y drones, para monitorear el tráfico y detectar infracciones desde el aire. Esta combinación de recursos permite una vigilancia más efectiva y una respuesta más rápida ante situaciones de riesgo.
Un aspecto importante que los responsables de Tráfico han destacado es la necesidad de educar a los conductores sobre los riesgos asociados a la conducción. Las campañas de concienciación se centran en las consecuencias de las imprudencias al volante, enfatizando que el 90% de los accidentes son atribuibles a factores humanos. Esto incluye no solo el exceso de velocidad, sino también el uso del teléfono móvil y la falta de atención a las condiciones de la carretera.
### La Importancia de la Concienciación y la Formación
La formación de los conductores es una parte esencial de la estrategia de los Mossos. Se han llevado a cabo sesiones educativas dirigidas especialmente a los conductores de entre 35 y 55 años, que son el grupo demográfico que más accidentes graves registra. Estas formaciones no solo abordan la importancia de respetar las normas de tráfico, sino que también se centran en la autoprotección y la adopción de hábitos seguros, como el uso del cinturón de seguridad y el casco.
Además, se ha observado un aumento en la movilidad en Cataluña, no solo por el turismo, sino también por los desplazamientos internos de los residentes. La liberalización de los peajes en la AP-7 ha contribuido a un mayor flujo de vehículos, lo que a su vez ha incrementado la necesidad de controles en las carreteras. La Jonquera, por ejemplo, se ha convertido en uno de los puntos de acceso más transitados desde Europa, con un promedio de 17,000 vehículos diarios en días laborables.
Los Mossos d’Esquadra también están atentos a los riesgos asociados con los desplazamientos cortos en carreteras secundarias, donde muchos conductores tienden a relajarse. La inspectora Bohé ha subrayado que la accidentalidad en estas vías puede ser igual de peligrosa que en las autopistas, y que es crucial mantener la atención en todo momento, independientemente de la distancia del viaje.
En resumen, el aumento de controles de tráfico en Cataluña es una respuesta directa a la creciente siniestralidad en las carreteras. Con un enfoque en la educación, la prevención y la vigilancia, las autoridades buscan no solo reducir el número de accidentes, sino también fomentar una cultura de responsabilidad entre los conductores. La seguridad vial es un asunto que concierne a todos, y cada conductor tiene un papel fundamental en la creación de un entorno más seguro en las carreteras.