En el competitivo mundo académico, pocos logran destacar como Leo Zheng, un joven de 18 años que ha hecho su camino desde Mallorca hasta Barcelona, donde actualmente cursa un doble grado en Física y Matemáticas en la Universitat de Barcelona. Con una trayectoria académica impresionante, Zheng ha demostrado que la dedicación y el esfuerzo son claves para alcanzar el éxito.
### Un Comienzo Brillante en Mallorca
Desde sus primeros años en el colegio San Josep Obrer de Palma, Leo mostró un talento excepcional en el ámbito académico. Su paso por el bachillerato de Ciencia y Tecnología fue notable, culminando con una media de 10 y obteniendo la segunda mejor nota en la Selectividad de 2024 en Baleares, un impresionante 13,68. Este logro no solo refleja su capacidad intelectual, sino también su determinación y pasión por el aprendizaje.
A pesar de que en sus años de ESO ya destacaba por sus buenas notas, fue en el bachillerato donde realmente encontró su vocación. Inicialmente, su interés se centraba en la Medicina, pero pronto se dio cuenta de que su verdadera pasión eran las matemáticas y la física. «Al salir de la ESO y empezar en bachiller ya vi que me gustaban más las ‘mates’ y la física, así que busqué otra carrera igual de exigente a la que poder meterme», explica Zheng. Esta búsqueda de un camino académico que realmente le apasionara lo llevó a inscribirse en un doble grado que, aunque desafiante, le permite explorar sus intereses más profundos.
### La Selectividad: Un Desafío Superado
El proceso de preparación para la Selectividad es un momento crucial en la vida de cualquier estudiante en España. Para Leo, este examen fue un filtro que le permitió demostrar su capacidad y esfuerzo. A diferencia de muchos de sus compañeros, que enfrentaron la Selectividad con nerviosismo, Zheng se sintió preparado. «Con lo que estudié y lo que sabía no estaba tan nervioso», recuerda. Su enfoque no se basa en fórmulas mágicas, sino en la constancia y el trabajo duro.
Leo considera que la Selectividad es menos exigente que los exámenes finales de bachillerato, donde experimentó una mayor presión. «En el San Jose te daban más caña que en ‘sele'», comenta, lo que refleja su experiencia en un entorno académico riguroso. Para aquellos que se preparan para este examen, su consejo es claro: «Tienen que presentarse sabiendo todo lo que han trabajado durante estos dos años y, sobre todo, que no se pongan límite y que aspiren a lo máximo posible».
### Adaptación a la Vida Universitaria en Barcelona
El cambio de vivir en Mallorca a Barcelona ha sido una experiencia enriquecedora para Leo. Aunque al principio podría parecer un gran desafío, él ha encontrado en esta transición una oportunidad para madurar tanto académica como socialmente. Residiendo en una de las residencias para estudiantes de la Ciudad Condal, ha podido disfrutar de la libertad de estudiar lo que realmente le apasiona, al mismo tiempo que ha cultivado amistades valiosas.
La vida universitaria no ha estado exenta de retos. Con un horario que incluye clases tanto por la mañana como por la tarde, Leo ha tenido que aprender a gestionar su tiempo de manera efectiva. A pesar de la carga académica, que incluye el doble de asignaturas en comparación con el año anterior, ha logrado mantener un buen rendimiento. «No soy el mejor, obviamente, pero tampoco estoy sacando malas notas. En el primer ‘cuatri’ saqué dos matrículas de honor», comparte con orgullo.
Además de su dedicación a los estudios, Leo se involucra en actividades extracurriculares, como organizar concursos de física con sus amigos. Sin embargo, reconoce que su tiempo libre es limitado, especialmente durante los períodos de exámenes. A pesar de esto, se siente optimista sobre su futuro: «Estar en Barcelona es una muy buena experiencia. Tengo ganas de ver si puedo irme a un piso el año que viene y ver cómo evoluciona todo. Estoy muy contento».
La historia de Leo Zheng es un testimonio de cómo la pasión, la dedicación y la adaptabilidad pueden llevar a un estudiante a alcanzar sus metas académicas. Su viaje desde Mallorca a Barcelona no solo ha sido un cambio de ubicación, sino también un paso significativo hacia la realización de sus sueños en el ámbito de la ciencia. Con un futuro brillante por delante, Leo continúa inspirando a otros estudiantes a seguir sus pasos y a nunca dejar de perseguir sus pasiones.