La reciente aparición de Kiko Rivera en el programa ‘De viernes’ ha captado la atención del público, no solo por su regreso a la televisión, sino por las revelaciones emocionales que compartió sobre su vida personal y familiar. En una entrevista cargada de sinceridad, el hijo de la famosa tonadillera Isabel Pantoja abordó temas delicados que han marcado su vida, incluyendo su relación con su hermana, Isa Pi, y su madre, así como sus experiencias en el amor y la infidelidad.
### Relaciones Familiares: Un Camino de Espinas
Kiko Rivera comenzó su intervención hablando sobre su complicada relación con su hermana, Isa. A pesar de los lazos familiares, ambos han estado distanciados, especialmente en lo que respecta a la herencia de su padre. Kiko expresó su dolor al recordar cómo Isa se posicionó del lado de su madre en este conflicto familiar. «Cuando me enteré de todo el tema de la herencia, hablé con mi hermana y se posicionó a favor de mi madre», comentó, añadiendo que también reconoce haber cometido errores en el pasado.
En un gesto de arrepentimiento, Kiko aprovechó la oportunidad para pedirle disculpas a Isa, manifestando su deseo de reconstruir su relación. «Me gustaría pedirle disculpas. Le diría que la quiero mucho. Sigue siendo mi niña pequeña. Siento no haber podido estar a la altura de lo que ella esperaba de mí», confesó. Este tipo de vulnerabilidad es poco común en el mundo del espectáculo, donde las apariencias a menudo prevalecen sobre la autenticidad.
Además, Kiko no dudó en abordar un episodio oscuro de su infancia, donde obligó a su hermana a quedarse en ropa interior y mojarla con una manguera. Este recuerdo, que Isa compartió en el mismo programa un año atrás, fue un momento de reflexión para Kiko, quien se mostró arrepentido por sus acciones. «Me gustaría volver a ser una familia», añadió, dejando claro que su deseo es sanar las heridas del pasado.
### Conflictos con Isabel Pantoja: Una Relación Tensa
La relación de Kiko con su madre, Isabel Pantoja, también fue un tema candente durante la entrevista. Kiko expresó su frustración por la falta de contacto entre su madre y sus hijos, afirmando que «se está perdiendo lo bonito que es ver crecer a tus nietos». La ausencia de los abuelos en la vida de sus hijos ha sido una carga emocional para él, y no dudó en reprocharle a su madre su actitud. «Solo esperaba de ella que estuviese a la altura como abuela», lamentó.
Kiko también se mostró crítico con la forma en que Isabel ha manejado su relación con él. «Me han pasado muchas cosas, una ruptura… ¿Qué necesitas para levantar un teléfono?», se preguntó, evidenciando su deseo de una comunicación más abierta y sincera. Este tipo de tensiones familiares es común en muchas familias, pero la exposición pública de estos conflictos añade una capa de complejidad que puede ser difícil de manejar.
### Reflexiones sobre el Amor y la Infidelidad
En la misma línea de sinceridad, Kiko Rivera habló sobre su reciente separación de Irene Rosales, con quien compartió varios años de su vida. Reconoció que su relación se vio afectada por la rapidez con la que se desarrollaron las cosas y admitió que, en ocasiones, se sintió culpable por no haber podido disfrutar plenamente de su tiempo juntos. «Fue todo tan rápido que casi no tuvimos tiempo de disfrutar de la pareja», reflexionó.
Uno de los momentos más impactantes de la entrevista fue cuando Kiko confesó haber sido infiel a Irene. «No es algo de lo que me sienta orgulloso, pero se me ha perdonado», dijo, dejando entrever que la infidelidad no fue un hecho aislado. A pesar de su arrepentimiento, Kiko reconoció que la falta de atención en su matrimonio pudo haber contribuido a que sucedieran cosas que no debieron pasar. «Si se va apagando el matrimonio y no das el paso, suceden cosas que no deben de suceder. Es algo que jamás me perdonaré», concluyó.
La entrevista de Kiko Rivera en ‘De viernes’ no solo ha sido un momento de revelaciones personales, sino también una oportunidad para que el público vea el lado más humano de una figura pública a menudo envuelta en controversias. Su disposición a hablar abiertamente sobre sus relaciones familiares y sus errores en el amor resuena con muchas personas que han enfrentado situaciones similares en sus propias vidas. En un mundo donde la imagen a menudo se prioriza sobre la verdad, Kiko ha elegido ser vulnerable, lo que podría ser un paso hacia la sanación tanto para él como para su familia.
