La ciudad de Barcelona y gran parte de Catalunya se encuentran bajo una alerta naranja debido a las intensas lluvias que han comenzado a caer desde la madrugada del jueves. Con precipitaciones que superan los 40 litros por metro cuadrado, el temporal ha provocado serias afectaciones en el transporte y la vida cotidiana de los ciudadanos. Las autoridades han tomado medidas preventivas y de emergencia para mitigar los efectos de este fenómeno meteorológico.
**Afectaciones en el Transporte y la Educación**
Desde las primeras horas de la mañana, las lluvias han causado el cierre de varias carreteras, incluyendo la BP-1413 en Cerdanyola del Vallès y la C-17 en Mollet del Vallès. Según el Servei Català de Trànsit (SCT), estas interrupciones han generado importantes retenciones en la AP-7, con colas que alcanzan hasta 9 kilómetros en algunos tramos. Además, las Rondas de Barcelona también han experimentado congestiones significativas, complicando aún más la movilidad en la ciudad.
La Universitat Pompeu Fabra ha decidido suspender las clases durante toda la jornada, ampliando la medida que inicialmente solo contemplaba la suspensión hasta las 13 horas. Esta decisión se ha tomado en consideración de la seguridad de los estudiantes y el personal académico, dado el riesgo de inundaciones y dificultades en el transporte público.
El aeropuerto de El Prat también se ha visto afectado, con múltiples cancelaciones y retrasos en los vuelos. Las condiciones climáticas adversas han llevado a las aerolíneas a cancelar rutas hacia destinos como Roma, Málaga y Londres, mientras que otros vuelos han experimentado demoras significativas. AENA, el gestor del aeropuerto, ha recomendado a los pasajeros que consulten el estado de sus vuelos antes de dirigirse al aeropuerto.
**Medidas de Emergencia y Recomendaciones**
Ante la gravedad de la situación, el Ayuntamiento de Barcelona ha activado el Plan de Emergencia por riesgo de insuficiencia de drenaje. Esta medida incluye la prohibición de acceso a los espigones de las playas y la recomendación de evitar cruzar zonas que puedan estar inundadas. Las autoridades han instado a la población a extremar la precaución y a mantenerse informados sobre las condiciones meteorológicas.
El 112 ha recibido más de 500 llamadas relacionadas con el temporal hasta las 9:30 horas, reflejando la preocupación de los ciudadanos ante la situación. La mayoría de las llamadas provienen de comarcas como el Vallès Occidental y el Barcelonès, donde las lluvias han sido más intensas. Los servicios de emergencia han atendido numerosos avisos, principalmente por inundaciones en bajos y caídas de árboles.
Los parques de la ciudad han sido cerrados de manera preventiva para garantizar la seguridad de los ciudadanos, y se han activado protocolos para atender cualquier eventualidad que pueda surgir debido a las condiciones climáticas. Los Bombers de Barcelona han estado en alerta, listos para responder a cualquier emergencia que pueda requerir su intervención.
La consellera de Interior, Núria Parlon, ha enfatizado que, aunque la previsión meteorológica no justifica la suspensión general de clases, es fundamental que los padres eviten llevar a sus hijos a los centros educativos si las condiciones son adversas en el momento de salir. Las escuelas han sido declaradas espacios seguros, pero se recomienda prudencia ante la posibilidad de que las lluvias intensas continúen.
Las autoridades meteorológicas han advertido que la línea de chubascos y tormentas se desplaza hacia el noreste de Catalunya, lo que podría agravar aún más la situación en las próximas horas. Se espera que las lluvias continúen durante el día, por lo que se aconseja a la población mantenerse informada y seguir las recomendaciones de las autoridades.
En resumen, la situación en Barcelona y Catalunya es crítica debido a las intensas lluvias que han causado múltiples afectaciones en el transporte, la educación y la vida cotidiana. Las autoridades están trabajando para garantizar la seguridad de los ciudadanos y minimizar los impactos de este fenómeno meteorológico.
