La situación hídrica en Catalunya ha experimentado un notable cambio en los últimos meses, especialmente tras años de sequía que afectaron gravemente a la región. La primavera de 2025 trajo consigo lluvias abundantes que elevaron las reservas de agua en los pantanos catalanes, superando el 80% de su capacidad. Sin embargo, a medida que el verano avanzaba, las temperaturas elevadas hicieron que los niveles de agua cayeran a cerca del 70%. Con la llegada del otoño, las recientes lluvias han contribuido a una nueva recuperación, aunque los embalses aún se encuentran por debajo del 75% de su capacidad.
La Agència Catalana de l’Aigua (ACA) es la entidad encargada de monitorear y reportar el estado de los embalses en Catalunya. Esta agencia publica informes diarios que detallan la situación de los embalses en todo el territorio, así como un registro específico para el sistema Ter-Llobregat, que es crucial para el abastecimiento de agua en las provincias de Barcelona y Girona, así como en la comarca de Solsonès.
**Estado Actual de los Embalses**
A fecha del 4 de noviembre de 2025, las reservas de agua en las cuencas internas de Catalunya se sitúan en un 72,91% de su capacidad total. Esta cifra representa un leve descenso del 0,1% con respecto al día anterior, pero mantiene a la región fuera de la situación de sequía, cuyo umbral se establece en el 60%. Este es un avance significativo, considerando que hace unos meses se había superado por primera vez desde marzo de 2022 la marca del 56% de capacidad de los pantanos.
El sistema Ter-Llobregat, que incluye cinco embalses principales: Sau, Susqueda, la Baells, la Llosa del Cavall y Sant Ponç, es fundamental para el suministro de agua en la región. Además, hay otros cuatro pantanos fuera de este sistema que también contribuyen al abastecimiento: Darnius Boadella, Foix, Siurana y Riudecanyes. La recuperación de estos embalses es un indicativo positivo, ya que todos presentan niveles superiores a los del año anterior. Comparando los datos actuales con los del mismo periodo del año pasado, se observa que el nivel de los embalses durante la primera semana de marzo de 2025 fue el doble que en 2024, lo que refleja una mejora significativa en la situación hídrica.
**Impacto de las Lluvias en la Recuperación**
Los primeros meses de 2025 han sido inusualmente lluviosos, marcando el octavo periodo más húmedo desde que se tienen registros en 1961. Este aumento en las precipitaciones ha sido crucial para revertir los efectos de la sequía que había asolado a Catalunya en años anteriores. Las lluvias continuas permitieron que, el 5 de abril, se decretara el fin de la sequía, cerrando marzo con los embalses de las cuencas internas llenos en más del 60% de su capacidad.
La importancia de estas lluvias no solo radica en el aumento de los niveles de agua, sino también en la recuperación de ecosistemas y la agricultura local, que habían sufrido las consecuencias de la falta de agua. La gestión adecuada de los recursos hídricos es esencial para garantizar un suministro sostenible y evitar futuras crisis. La ACA continúa trabajando en la monitorización y gestión de los embalses, asegurando que se tomen las medidas necesarias para mantener un equilibrio hídrico en la región.
A medida que se avanza hacia el invierno, es crucial que la población y las autoridades mantengan una conciencia sobre el uso responsable del agua. La experiencia de la sequía reciente debe servir como un recordatorio de la importancia de la conservación y la gestión sostenible de los recursos hídricos. La colaboración entre la ciudadanía y las instituciones es fundamental para enfrentar los desafíos que puedan surgir en el futuro, garantizando así un acceso adecuado al agua para todos los habitantes de Catalunya.
