Mataró, una ciudad con una rica tradición cooperativa, se prepara para asumir un papel destacado en el ámbito de la economía social al ser nombrada la primera capital de esta economía en Cataluña para el año 2026. Este anuncio fue realizado por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía, Yolanda Díaz, durante el Consejo de Fomento para la Economía Social celebrado en Madrid. La elección de Mataró no es casualidad; la ciudad cuenta con un ecosistema vibrante que alberga más de 100 entidades que operan en diversos sectores, incluyendo la cultura, la energía, los servicios y la inclusión social.
La Capitalidad de la Economía Social fue instaurada en 2021 con el objetivo de promover un mayor conocimiento sobre este modelo económico y las empresas que lo componen, tales como cooperativas, sociedades laborales, centros especiales de empleo de iniciativa social, empresas de inserción y mutualidades. Mataró toma el relevo de otras ciudades que han recibido esta distinción, como Murcia, València, San Sebastián, Santiago de Compostela y Teruel.
### Una Historia de Cooperación y Progreso
La historia cooperativa de Mataró se remonta a 1864, cuando se fundó la Cooperativa Obrera Mataronense, la primera de su tipo en España, impulsada por los propios trabajadores. Esta tradición ha perdurado a lo largo de los años, dando lugar a un ecosistema cooperativo que sigue creciendo y evolucionando. Entre las entidades que han marcado la pauta en este ámbito se encuentran la Unió de Cooperadors, el Cafè Nou, el Forn del Vidre y el Cafè de Mar, que han contribuido a la consolidación de un modelo de negocio basado en la colaboración y el apoyo mutuo.
El Ayuntamiento de Mataró ha destacado que la elección de la ciudad como capital de la economía social se debe a su Plan Estratégico de Economía Social, que fue aprobado por consenso entre diferentes actores de la sociedad. Este plan es considerado un ejemplo de colaboración entre los sectores público y privado, así como de la participación activa de la sociedad civil. La vicepresidenta Díaz ha expresado su confianza en que esta capitalidad no solo beneficiará a Mataró, sino que también servirá como un modelo a seguir para otras ciudades en España, promoviendo un enfoque basado en la creatividad, el compromiso y la cooperación interterritorial.
### Un Ecosistema Dinámico y Diversificado
Mataró no solo es un referente en la economía social por su historia, sino también por su capacidad de innovación y adaptación a las nuevas realidades económicas. En los últimos años, la economía social ha experimentado un crecimiento significativo en la ciudad, con un aumento del 10% en el número de empresas en este sector en Barcelona en los últimos cinco años. Este crecimiento es un reflejo del interés creciente por modelos de negocio que priorizan el bienestar social y la sostenibilidad.
La ciudad también forma parte de la Xarxa de Municipis de l’Economia Social i Solidària (XMESS), una red que busca fortalecer la economía social a nivel local y fomentar la colaboración entre municipios. Además, en el TecnoCampus de Mataró se imparte la cátedra de Economía Social y Solidaria, lo que demuestra el compromiso de la ciudad con la formación y la investigación en este ámbito.
Cada año, Mataró acoge la Setmana de l’Economía Social i Solidària, un evento que reúne a expertos, emprendedores y ciudadanos para debatir sobre las tendencias y desafíos de la economía social. Este tipo de iniciativas no solo promueven el conocimiento, sino que también crean un espacio para la colaboración y el intercambio de ideas entre diferentes actores del ecosistema.
La designación de Mataró como capital de la economía social representa una oportunidad única para la ciudad y sus habitantes. No solo se trata de un reconocimiento a su trayectoria, sino también de un impulso para seguir desarrollando un modelo económico que prioriza el bienestar de las personas y el entorno. Con más de un siglo de historia cooperativa, Mataró se posiciona como un faro de innovación y sostenibilidad en el ámbito de la economía social, inspirando a otras ciudades a seguir su ejemplo y a adoptar prácticas más responsables y colaborativas en el mundo empresarial.
