La jueza de instrucción número 24 de Madrid, Lidia María Paloma Montaño, ha decidido abrir una investigación formal contra Santos Cerdán, exsecretario de Organización del PSOE, por presunto falso testimonio. Esta acción se deriva de una querella presentada por la organización Hazte Oír, que sostiene que Cerdán «faltó sustancialmente a la verdad» en su declaración ante la comisión de investigación del Senado relacionada con su conexión con Koldo García, exasesor del exministro José Luis Ábalos.
### Contexto de la Investigación
La querella se centra en las declaraciones de Cerdán durante su comparecencia ante el Senado, donde limitó sus contactos con Koldo García a unas pocas ocasiones. Sin embargo, informes de la Guardia Civil sugieren que la relación entre ambos era mucho más estrecha de lo que Cerdán admitió. La jueza ha señalado que existen indicios claros de que su relato no coincide con la realidad, lo que ha llevado a la apertura de esta investigación.
El auto de la jueza, fechado el 15 de octubre, indica que el juzgado está a la espera de que el Congreso confirme que Cerdán ya no es aforado, tras haber renunciado a su acta de diputado. Este paso es crucial, ya que la condición de aforado de un diputado puede complicar los procedimientos judiciales. Además, se ha establecido una fianza de 3.000 euros que el querellante debe abonar para continuar con el proceso.
El Código Penal español establece en su artículo 502.3 que cualquier persona que falte a la verdad en una comisión parlamentaria de investigación puede enfrentarse a penas de prisión de seis meses a un año o multas de 12 a 24 meses. Esta normativa pone de manifiesto la seriedad de las acusaciones que enfrenta Cerdán.
### Detalles del Interrogatorio
Durante su comparecencia, Cerdán fue interrogado sobre varios aspectos de su relación con Koldo García. Las preguntas formuladas por los senadores eran directas y claras, indagando sobre si Cerdán había mantenido contacto con García entre 2021 y 2023, si conocía su papel como intermediario en la adquisición de mascarillas, y si había dado instrucciones para beneficiar a ciertas empresas. A todas estas preguntas, Cerdán respondió negativamente, lo que ha sido cuestionado por la jueza, quien considera que las evidencias apuntan en una dirección contraria.
El informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que se ha presentado como parte del caso, contradice las afirmaciones de Cerdán. Según la magistrada, las respuestas del exdiputado no solo son inconsistentes, sino que también revelan una posible intención de ocultar la verdad. La jueza ha expresado que archivar la querella en este momento sería «precipitado», dado que la discrepancia entre el testimonio de Cerdán y la evidencia disponible es evidente.
Cerdán, quien se encuentra en prisión provisional desde el 30 de junio, ha sido señalado como un actor clave en una supuesta trama de adjudicación irregular de obras públicas, en la que se habrían cobrado comisiones a cambio de contratos. Esta situación ha generado un gran revuelo en el ámbito político y ha puesto en tela de juicio la integridad del PSOE en el contexto de la gestión de la pandemia.
### Reacciones y Consecuencias Políticas
La situación de Santos Cerdán ha tenido repercusiones significativas dentro del PSOE y en el panorama político español en general. La apertura de esta investigación ha reavivado el debate sobre la transparencia y la rendición de cuentas en la política. La presión sobre el partido es palpable, ya que cualquier indicio de corrupción puede afectar su imagen y su apoyo electoral.
Desde la defensa de Cerdán, los abogados han manifestado que no tienen conocimiento de la existencia de este procedimiento, argumentando que su cliente no ha recibido notificación alguna. Además, han señalado que los hechos en cuestión provienen de un atestado en el que Cerdán no es testigo, sino investigado, lo que complica la acusación de falso testimonio.
El caso de Cerdán se suma a una serie de escándalos que han sacudido al PSOE en los últimos años, lo que ha llevado a muchos a cuestionar la ética y la moralidad de sus líderes. A medida que se desarrollan los acontecimientos, la atención se centrará en cómo el partido maneja esta crisis y qué medidas tomará para restaurar la confianza pública.
La situación de Santos Cerdán es un claro recordatorio de que la política está bajo un escrutinio constante y que las acciones de los funcionarios públicos tienen consecuencias. La sociedad espera transparencia y responsabilidad, y el desenlace de este caso podría tener un impacto duradero en la percepción del PSOE y en la política española en su conjunto.