La situación laboral de la Guardia Urbana de L’Hospitalet de Llobregat ha estado marcada por tensiones y conflictos en los últimos años. Sin embargo, recientes avances en las negociaciones entre los sindicatos policiales y el gobierno municipal han generado un atisbo de esperanza para la resolución de este prolongado conflicto. A medida que se reanudan las conversaciones para un nuevo convenio, ambas partes parecen estar acercándose a un acuerdo que podría mejorar las condiciones laborales de los agentes.
**Contexto del Conflicto Laboral**
Desde hace casi una década, las relaciones entre la Guardia Urbana y el Ayuntamiento de L’Hospitalet han estado plagadas de dificultades. Las protestas de los agentes han sido una constante, llegando incluso a paralizar sesiones del Pleno municipal en el pasado. La falta de un nuevo convenio ha llevado a los sindicatos a exigir mejoras en las condiciones salariales y laborales, mientras que el consistorio ha condicionado estas mejoras a una reducción del absentismo laboral, que ha alcanzado cifras alarmantes en los últimos meses.
El portavoz del sindicato SPL-CM, Juanjo Torán, ha manifestado que en la última reunión con el gobierno local, se dejó claro que no se aceptaría ninguna propuesta que no igualara al menos la media de sueldo anual de los cuerpos policiales de municipios similares en la provincia de Barcelona. Esta cifra se traduce en un incremento de aproximadamente 2.000 euros brutos anuales, lo que representa una mejora significativa para los agentes. Sin embargo, los sindicatos insisten en que esta mejora debe ser garantizada y no estar sujeta a índices de absentismo, que han sido un punto de fricción en las negociaciones.
La oferta inicial del gobierno municipal incluía una mejora fija de 1.000 euros anuales para toda la plantilla, además de otros 3.500 euros anuales que dependerían de que el absentismo no superara los 19 días al año. Esta propuesta ha sido considerada insuficiente por los sindicatos, que argumentan que el número de días es demasiado bajo y no refleja la realidad del trabajo policial.
**Expectativas de Acuerdo y Futuras Reuniones**
A pesar de las diferencias, las partes han acordado mantener nuevas reuniones para continuar las negociaciones. Se han programado citas para el 21 y el 23 de octubre, y las fuentes municipales se muestran optimistas sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo en un futuro cercano. Sin embargo, los sindicatos son más cautelosos y creen que el proceso podría llevar más tiempo, aunque también están esperanzados en que se logre un cierre satisfactorio.
El alcalde David Quirós, quien asumió el cargo en junio de 2024, ha reconocido que la resolución de este conflicto es una de sus principales prioridades. En un reciente acto, enfatizó la importancia de fortalecer el ámbito de la Guardia Urbana y mejorar las condiciones de trabajo de los agentes, quienes deben desempeñar su labor en un entorno adecuado. Quirós también ha señalado que el absentismo laboral es un gran reto que debe ser abordado, y ha prometido que el consistorio proporcionará los recursos necesarios para que los agentes puedan realizar su trabajo de manera efectiva.
Las tensiones no solo se limitan a las negociaciones entre el Ayuntamiento y la Guardia Urbana. La oposición política también ha comenzado a presionar al gobierno local, solicitando un Pleno extraordinario para que se den explicaciones sobre la situación de inseguridad en la ciudad. Los portavoces del PP y ERC-EUiA han manifestado su preocupación por la falta de seguridad y han instado al gobierno a actuar con rapidez para resolver los problemas que afectan a la comunidad.
En resumen, la situación laboral de la Guardia Urbana de L’Hospitalet de Llobregat está en un punto crítico, con negociaciones en curso que podrían llevar a mejoras significativas en las condiciones de trabajo de los agentes. A medida que se acercan las fechas de las nuevas reuniones, tanto el gobierno municipal como los sindicatos están bajo presión para encontrar una solución que beneficie a todas las partes involucradas. La comunidad también está atenta a estos desarrollos, ya que la seguridad en la ciudad depende en gran medida de la capacidad de la Guardia Urbana para operar de manera efectiva y con el apoyo adecuado.